Capitulo 20

Bill: sabes que no conozco (tu país) ¿verdad?
Devon: si, obvio
Bill: ¿Dónde queda eso?
Devon: uish, sólo sígueme
Devon y Bill recorrieron los lugares donde podrías haber estado, hasta que al fin dieron con tu paradero, un pequeño parque, solías ir allí cuando niña, estabas sentada en el césped en una pendiente, más abajo había una laguna con algunas aves, no hacías nada más que mirar las nubes, pensabas en Bill, que estaría haciendo, de pronto Devon se acercó a ti
Devon: hola (tu apodo)
Tú: hola Devon ¿Cómo estás?
Devon: bien, muy bien ¿y tú?
Tú: mmm… creo que un poco triste, es todo
Devon: es por lo de Bill ¿verdad?
Tú: si, pero ¿cómo sabes eso?
Devon: era una suposición – rió nerviosa
Tú: si… lo que digas, y ¿Qué haces por estos lados?
Devon: aps, nada, y ¿por qué pelearon?
Tú: es que, ya sabes, por una estupidez
Devon: ¿y estas enojada con Bill?
Tú: la verdad no, solo un poco molesta, no creí que se enojaría por eso, en verdad no fue mi culpa
Devon: amh, ya veo, ¿si te pidiera perdón, lo disculparías?
Tú: si, y ¿a qué se deben tantas preguntas?
Devon: a nada, ups, mira la hora, es un poco tarde, me debo ir, ya sabes como se pone mi mama jajá, nos vemos – se levanto, sacudió su ropa y se marchó corriendo
Tú: ¿qué sucede hoy?
En las afueras del parque:
Devon: Bill
Bill: ¿Qué dijo?
Devon: te perdonará si le pides disculpas
Bill: genial, emh, espera aquí – se apresuró a llegar
Devon: si claro, no me perdería nada – corrió tras Bill, sin que este la viera
En la pendiente:
Bill: – P: que le puedo decir primero, uff que idiota, un hola – hola – P: diablos no sonó como quería
Tú: ¿mmm? – te diste media vuelta, y lo viste, con su cara perfecta y tierna, acariciando su brazo como un pequeño infante a punto de decir la verdad a su madre, se sentó a tu lado mirando la laguna, jugó con el pasto
Bill: lindo paisaje, ¿no?
Tú: – estabas un poco incomoda – sí, eso creo
Bill: en especial porque estas… hay patos y esas cosas jajá – joder, no me atreví a decirlo
Tú: si, por los patos – jugueteaste con tus dedos, de vez en cuando lo mirabas de reojo
Bill: uish, esto es tan estúpido, lo siento mucho, no sabes cuánto, no debí haberme enojado por esa estupidez, ahora recién me doy cuenta lo idiota que fui, solo… no quería que te fueras, es todo, realmente no estoy molesto y quiero que me disculpes por favor, ¿si?
Tú: – te abalanzaste sobre él, lo abrazaste fuertemente – ups perdón, jeje – te separaste rápidamente, tus mejillas ardían
Bill: eso en un sí, supongo
Tú: – afirmaste con la cabeza – entonces somos amigos de nuevo
Bill: sip – luego se sonrojó un poco y menciono bajo – ¿sólo amigos?
Tú: amh, emh, bueno, si, a menos que tu quieras, ya sabes que seamos… ¿Qué dices?
Bill: si tu quieres, claro, ¿Qué dices?
Tú: ¿yo? Emh, digo que, ¿Qué dices?
Bill: las damas primero

En el siguiente capítulo:

Bill: que si
Tú: ¿en serio?
Bill: –…te tomo entre sus brazos y te beso desesperadamente, lanzándose sobre ti
Tú: ¿nos espiabas?
Devon: emh, no, solo volví a hablar contigo y los vi cayendo